Las personas hacen muchas cosas para conseguir amor, bajan de peso para así poder sentirse atractivas, también se arreglan de determinada manera, hasta llegar a cambiar sus comportamientos adaptándose a la pareja.
El vivir tratando de agradar al ser amado se convierte en una exigencia interna, para finalmente perder su autenticidad, este tipo de relaciones esta condenada al fracaso, puesto que esta fachada dura poco tiempo, produce frustración y angustia en la persona que trata de adaptarse al otro, frases como: “por ti voy a cambiar”, resultan contraproducentes pues el único sentido es ser aceptado. Por el contrario el cambio responsable es cuando cada uno toma la decisión de cambiar.
Se piensa “necesitas ser hermosa para ser amada”, pero esto es un condicionamiento que terminaría con la esperanza de amor de muchos que no cumplimos con “estándares de belleza”, seria más apropiado decir “mereces ser amada y eso te hace hermosa”, las personas más atractivas y maduras son las que se aman así mismas, entonces atraen a quienes las valorarán en la misma medida que ellos mismos se aman.
El tener una autoestima elevada hace que nos aceptemos y podamos aceptar a los demás como son, sin tratar de cambiarlos; nosotros solo podemos invitar a quienes nos rodean al bienestar, pero no obligarlos, ni condicionarlos. El verdadero amor es el que mira mas allá de la apariencias y te invita a crecer interiormente.
Psicólogo Julio Salas Dahlqvist
C.Ps.P. 5171
Teléfono: 3397508
